Comunicación, Educación, Pandemia y más allá...

En estos días en el que la mayoría de nosotros estuvimos en casa vimos cómo los medios de comunicación cumplieron una función. Mi balance es francamente negativo y quería escribir sobre eso. Pero al empezar a garabatear sobre el tema encontré esta síntesis que Florencia Gómez Palma ya tenía escrita y me pareció mucho mejor que lo dijera ella, exactamente con sus palabras. Le pedí permiso y me concedió ese honor. Florencia es Licenciada en Ciencias de la Comunicación, de la UBA, tiene un Magister en Comercio Electrónico y Marketing Digital de ISECOM, España y una especialidad en Creatividad e Innovación de Disney University.
Me pareció mucho más interesante el enfoque que ella quiso darle ya que pone su mirada desde la comunicación (aunque también es docente en diferentes universidades de Argentina y Bolivia) y yo seguramente hubiese sesgado la mirada desde lo educacional.
Es corto y contundente y más allá de la coyuntura podría ser un buen "starting point" de un debate que nos adeudamos, que nos lleve a las transformaciones en los medios, tradicionales y no tradicionales que estaríamos necesitando.
Les dejo por acá el texto que relaciona magistralmente Comunicación y Educación en tiempos de pandemia. Y porque no también para la post pandemia...
Para leer y reflexionar.


Los medios de comunicación todos, empezando por los tradicionales y masivos, pero no descuidando el resto, tienen que cambiar su función en esta coyuntura, pasando de un modelo informativo a un modelo educativo.La información y desinformación que muestran en sus programas no hace otra cosa que, o bien confundir o bien, provocar que mucha gente opte por no verlos justamente debido a lo primero. Hay una saturación tal de información que el efecto termina siendo contraproducente. Hoy más que nunca se necesita comunicación para educar. La comunicación supone un ida y vuelta, y nosotros los comunicadores sabemos que el mensaje se termina de construir en el receptor. Para educar es necesario "chequear" constantemente si nos están entendiendo del otro lado; lo que hacemos los docentes cuando preguntamos "¿se entiende?" o "¿tienen alguna pregunta?". Y esto es lo que está pasando, hay un bombardeo de información que satura, cansa, confunde, crea pánico, y no ayuda a tomar conciencia, y menos ayuda a pensar qué puede hacer cada uno para sumar en estos momentos. Hoy no necesitamos programas de TV que tengan invitados para llenar los espacios, sino espacios para educar de verdad, para comunicar con mayúscula, y así brindar apoyo a quienes la necesitan a causa del confinamiento.

Florencia Gómez Palma

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